Entender los tipos de instalaciones para el cuidado de ancianos
En la actualidad, hay muchos tipos diferentes de centros de asistencia para ancianos o centros asistidos para elegir. El desafío consiste en encontrar lo que sea adecuado para el anciano y sus seres queridos. Una instalación que se sienta como en casa y que ofrezca atención individualizada de alta calidad, así como una comunidad de apoyo, es lo que todos esperan encontrar, pero que no todos los tipos de instalaciones de atención para personas mayores, ofrecen.
Con la gran cantidad de tipos de instalaciones que existen, puede resultar abrumador elegir lo que es adecuado. Saber qué nivel de atención necesita el ser querido suele ser el mejor lugar para comenzar.
Echemos un vistazo a algunas de las opciones más comunes disponibles:
Las comunidades independientes para personas mayores atienden a personas mayores que son autosuficientes y que no necesitan atención práctica. Los residentes viven en apartamentos privados totalmente equipados que normalmente incluyen una pequeña cocina y, a veces, una cocina completa. Se trata de grandes comunidades que suelen ofrecer una amplia gama de actividades intelectuales, físicas y sociales.
Las comunidades de vida asistida brindan alojamiento y atención a las personas mayores que pueden necesitar ayuda con las tareas diarias, pero que no requieren la atención especializada que se brinda en un hogar de ancianos. La asistencia con los medicamentos, las actividades de la vida diaria, las comidas y las tareas del hogar se proporciona de forma rutinaria. Los residentes viven en apartamentos privados que a veces cuentan con cocinas. El personal está disponible las 24 horas del día, las actividades y las oportunidades de entretenimiento son abundantes y el transporte a las citas está disponible. Un área especial para el cuidado de la memoria está disponible en algunas comunidades, pero no en todas.
Los hogares de atención residencial ofrecen muchos de los mismos servicios que las instalaciones de vida asistida más grandes, pero lo hacen en entornos más pequeños y más hogareños. La mayoría de las residencias de ancianos emplean o están dirigidas por enfermeras y albergan a 10 personas mayores o menos. El entorno en una casa residencial es más íntimo y la dinámica de grupo más familiar. De hecho, los residentes pueden compartir la casa con la familia del operador y tener la oportunidad de interactuar con varias generaciones de forma regular.
Los hogares de ancianos son para personas mayores que requieren un seguimiento más intensivo las 24 horas y asistencia médica. Los residentes típicos de hogares de ancianos sufren de condiciones físicas o mentales severas y debilitantes que los dejan incapaces de cuidar de sí mismos. Pueden estar postrados en cama, en silla de ruedas o tener necesidades médicas que requieran atención de enfermería especializada diaria. La buena noticia es que los hogares de ancianos modernos no solo satisfacen las necesidades físicas de los residentes, sino que ofrecen actividades adaptadas específicamente a las capacidades individuales.
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