7 cosas que no debes decirle a alguien con demencia (y qué decir en su lugar)

Hablar con un anciano con demencia puede ser difícil y agotador emocionalmente. El Alzheimer y la demencia pueden dar lugar a conversaciones que no tienen sentido, son inapropiadas o incómodas y pueden molestar a la persona mayor. Sin embargo, con el tiempo, es importante adaptarse al comportamiento de la persona y comprender que su condición no cambia quiénes son.

Para los mayores, es importante responder siempre con paciencia. Aquí hay algunas cosas que debes recordar no decirle a alguien con demencia y lo que puede decir en su lugar.

 1. «Estás equivocado»

Para los cuidadores experimentados, esto puede parecer evidente. Sin embargo, para alguien que no ha lidiado con la pérdida de la función cognitiva antes, como puede ser un familiar, puede ser difícil aceptar algo que un ser querido dice que verdaderamente no es cierto. Sin embargo, discutir no tiene ningún beneficio y es mejor evitar molestar a una persona mayor con demencia, que ya se encuentra en un estado emocional vulnerable debido a la confusión.

En cambio, cambia de tema.

Es mejor distraer y no manifestar estar en desacuerdo. Si una persona mayor hace un comentario incorrecto, no intentes pelear con él o ella; simplemente cambia de tema y habla de otra cosa, lo mejor, hablar de algo agradable, para cambiar su enfoque. Hay muchas cosas que no debes decirle a alguien con demencia, pero si hay una que debemos recordar, es evitar decir cualquier cosa que suene como “estás equivocado”.

2. «¿Te acuerdas …?»

Esta es una frase que uno puede soltar accidentalmente, sin ni siquiera darse cuenta. Los familiares a menudo preguntan a las personas mayores si recuerdan cosas. Por supuesto, la respuesta suele ser no, porque el olvido es el síntoma más común de la demencia. Aún así, puede ser difícil evitar preguntar cosas como «¿te acuerdas de (miembro de la familia / amigo/compañero)?» o, «¿qué hiciste hoy?». Esto puede provocar vergüenza y tristeza cuando una persona mayor se da cuenta de que ha perdido la memoria.

En su lugar, puedes decir: «Recuerdo …»

No hay forma de evitar por completo hablar del pasado y, de hecho, puede ser una experiencia alegre para los miembros de la familia o los compañeros de la residencia reflexionar sobre los viejos recuerdos. Sin embargo, intenta cambiar su enfoque para ser sensible a la condición de la persona mayor. Cuando repases las cosas que han sucedido, en lugar de eso, puedes decir: «Recuerdo cuando solíamos …» o «Recuerdo cuando fuimos a ese restaurante …» y así sucesivamente.

3. «Fallecieron».

Desafortunadamente, es un hecho común y desgarrador: una persona mayor preguntará sobre un ser querido fallecido como si todavía estuviera cerca. Pueden estar molestos porque la persona no lo llama o no lo visita, o le pregunta dónde está. Decirles que su cónyuge, amigo u otro ser querido ha fallecido no ayudará, especialmente en las últimas etapas de la demencia, ya que probablemente se sentirán extremadamente heridos por la noticia y es posible que ni siquiera lo crea. Incluso si le dices que la persona ha muerto y te cree, lo más probable es que se olvide poco después y tendrás que repetir el proceso de nuevo.

En lugar de…

Desafortunadamente, no hay una respuesta sobre qué hacer cada vez que surge esta situación. No es improbable que alguien con demencia pregunte muchas veces por un ser querido fallecido. En el caso de que pregunten directamente si la persona ha fallecido, lo  mejor es ser sincero. En otras ocasiones, puede ser mejor cambiar el tema de conversación por completo, ya que recordarles el fallecimiento de su ser querido no funcionará y solo lo entristecerá. Podrías ofrecer otra explicación de por qué la persona no está cerca o decirle que la verá pronto y luego cambiar suavemente de tema. Cada vez es diferente, y la decisión de cómo responder depende en última instancia de lo que creas que es mejor.

4. «Te lo dije …»

Se debe esperar tener que repetir cosas al cuidar o pasar tiempo con alguien con demencia. Es posible que te encuentres diciéndole algo a la persona mayor, solo para que lo olvide y te haga la misma pregunta una vez más. En este caso, decir ‘Ya te lo dije’ puede ser doloroso, recordarle a la persona su enfermedad y confundirla aún más.

En cambio, repite lo que dijiste.

Se necesitará paciencia y es posible que se sienta frustrado, pero recuerda que su olvido no es culpa suya. Repite lo que sea que ya les hayas dicho y díselo con la misma amabilidad que la primera vez. De lo contrario, informarles que es algo por lo que ya han preguntado solo les hará sentir que hicieron algo mal, incluso no entenderán lo que está pasando o de que se trata.

5. «¿Qué quieres comer?»

Preguntas abiertas como esta pueden causar muchos problemas a una persona mayor con Alzheimer o demencia. Esto es especialmente cierto si la pregunta implica recordar algo, como «¿qué hiciste ayer?», aunque en realidad, incluso algo tan simple como «¿a dónde quieres ir?». podría causar angustia.

En su lugar, puedes decir: «¿Te gustaría comer algo de fruta?»

Si vas a hacer una pregunta, intenta formularla de manera que pueda responderse con un simple sí o no. Evitar las preguntas abiertas aliviará la presión del anciano, ya que no se verá obligado a intentar recordar algo que no puede ni a tomar una decisión.

6. «Ven, ponte los zapatos y vayamos al coche, tenemos que ir a la tienda a comprar algunas cosas».

Esta oración contiene muchos comandos, y alguien que sufra de Alzheimer o demencia no podrá procesar la información al mismo ritmo que tú. Esto puede generar confusión. Trata de evitar las oraciones largas.

En su lugar, ve paso a paso.

Usa un lenguaje simple (pero no infantil) y usa oraciones más cortas para dividirlo en comandos de un solo paso. Para el ejemplo anterior, podrías decir «Ponte los zapatos». Luego, más tarde, sigue con «vamos al coche ahora», y así sucesivamente.

 7. «Su demencia está empeorando».

Hay cosas que no debes decirle a una persona con demencia, pero también cosas que no debes decir sobre esa persona. Lo más importante es que nunca hables de una persona mayor en la misma habitación que se encuentra, como si no estuviera allí; el hecho de que estén en silencio no significa que no estén escuchando. Incluso si no responden a las cosas que dices, es mejor asumir que pueden entender cuando hablas de ellos.

En cambio, sal de la habitación.

Lo mejor es simplemente salir de la habitación para hablar sobre la persona mayor o su condición. Esto evita causarles dolor al hablar como si ya se hubieran ido, aunque todavía estén presentes.

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